Nuestro ámbito de actuación y nuestros colaboradores nos permite tener una visión de la empresa más allá de la simple consulta jurídica.

La firma ha preferido apostar por la calidad del servicio en detrimento, en muchas ocasiones, de la expansión incontrolada.

Nuestra filosofía descansa en el principio de la mutua confianza entre abogado y cliente, por lo que el trato personalizado no es una norma o forma de marketing sino una necesidad de trabajo.

El despacho se fundó en 1973 por Rafael Moreno, cuenta por lo tanto con 51 años de experiencia.

En la actualidad cuenta con 10 profesionales, 6 abogados y 4 colaboradores.